Algunas veces llegan cosas a nuestras manos que no nos lo podemos creer de lo buenas que están, este es el caso de uno de los ingredientes que llevan estas alitas de hoy. Yo ya había cumplido con la marca Sabari al publicar una entrada con sus productos ( aquí ) y colocar su logo en el Blog, cosa que he hecho con mucho gusto porque me ha encantado sus productos y en mi Blog no se pone cualquier cosa, solo de lo bueno lo mejor, eso os lo aseguro, pero uno de los balsámicos, no había tenido la oportunidad de probarlo todavía y el otro día preparando unas alitas de pollo, recordé que hace muchos años yo le ponía unas gotas de vinagre al pollo porque le realza mucho el sabor, así que pensé - ¿ porque no un balsámico de manzana? - igual quedan bien.
Bien no, lo siguiente, no había probado nunca un sabor ni una textura como esta en un vinagre, de hecho yo creo que es más una miel de manzana con un leve toque, con un color y un olor que es una maravilla, perfecta para preparar estas alitas o cualquier corte.
La marca Sibari y la receta esta:
Ingredientes
1Kg. de alitas de pollo troceadas
1 limón
1 pastilla de caldo de pollo
Sal y pimienta
Tomillo fresco
Sal de ajo
Chalota o escalonia deshidratada
Balsámico de manzana Sibari
Aceite de oliva virgen extra
Lo primero que haremos es adobar las alitas durante una media hora en el zumo de limón, salpimentadas y con tomillo fresco, las dejamos fuera del frigo tapadas para que pierdan el frío.
Ponemos una sartén con una gota de Aove y doramos las alitas escurridas del adobo y con unas ramas más de tomillo fresco.
Después añadimos la sal de ajo y la chalota deshidratada, si no se tiene también se le puede poner cebolla.
Vamos dorando y cuando cojan color, le añadimos la pastilla de caldo de pollo desmenuzada y el jugo del adobo.
Lo integramos y ponemos una cucharada grande de Balsámico de Manzana.
Seguimos mareándolas a fuego lento hasta que se vayan cocinando.
Cuando estén casi terminadas tendremos esta salsita que es como
una miel de manzana y tomillo.
Las dejamos bien doradas y crujientes por fuera.
Ponemos otro poco de tomillo fresco y retiramos del fuego.
Emplatamos las alitas poniendo un poco de la salsa en un lado y unas gotas de Balsámico de manzana Sibari.
Adornamos con una ramita de tomillo fresco.
Las podemos acompañar de unas patatas fritas y unas manos muy limpias.
A que tienen una pinta estupenda?
Pues estaban para chuparse los dedos de ese balsámico que se quedaba pegado en ellos.
Buen provecho
;-)