Ya me voy atreviendo con otras formas, este en teoría tenia que quedar muy bonito, pero ha quedado un poco retorcido, pero con una corteza crujiente que da gusto.
La semana que viene empezaré a probar con masas madres y todas esas cosas a ver que tal, de momento me apaño con estos que salen muy ricos y son superfáciles.
Ingredientes
250 gr de harina de fuerza
150 gr de agua
5 gr de levadura fresca
5gr de sal
250 gr de harina de fuerza
150 gr de agua
5 gr de levadura fresca
5gr de sal
Poner en un cuenco grande, la harina y desmenuzar la levadura con los dedos.
Echar el resto de los ingredientes y mezclar durante 3 minutos, hasta que la masa empiece a formarse. Poner la masa en la superficie de trabajo. Si la masa está bien no enharinar mucho la mesa de trabajo. Si conseguimos una masa blanda, pero no pegajosa en exceso, luego el pan será más esponjoso.
Levantar la masa y dejarla caer.
Estirar la masa.
Estirar la masa.
Enharinar ligeramente la superficie de trabajo
y formar una bola, escondiendo los bordes hacia abajo.
Dejar reposar cubierta con un paño de cocina, durante 1 hora más
o menos, lejos de corrientes de aire.
Precalentar el horno a 250˚
Dividir la masa en cuatro trozos iguales y hacer 4 tortas y pegarlas unas a otra con un poco de agua.
Dividir la masa en cuatro trozos iguales y hacer 4 tortas y pegarlas unas a otra con un poco de agua.
Poner en una bandeja enharinada y hacer unos cortes en cada torta.
Poner en el horno durante 35-40 minutos a 200º, meter un cacharro con agua dentro del horno para producir vapor.
Cando esté dorado y crujiente sacar y dejar que se enfríen encima de una parrilla. Servir entero ó cortado a rodajas gruesas.