Creo que ya he demostrado muchas veces cuanto me gusta la carne de conejo, si es de monte o una liebre ya es que me pierdo, que sabor más particular y rico tienen!
Entiendo que hay gente a la que le tire para atrás, pero a mi me tira "palante" más que nada por el miedo de quedarme sin nada.
Entiendo que hay gente a la que le tire para atrás, pero a mi me tira "palante" más que nada por el miedo de quedarme sin nada.
Como lo hago una vez por semana suelen ser de los del mercado, que tienen una carne blanquita y tierna pero que realmente no saben casi a nada, como los pollos de granja que tampoco tienen sabor, por lo tanto hay que ayudarlos y mucho.
Sin complicarnos la vida en exceso pueden salir platos como este, riquísimo y muy fácil de hacer a la vez que barato, completo, sano y nutritivo.
Ingredientes
1 conejo troceado
2-3 dientes de ajo
1 cebolla
1 tomate
1 latita de champiñones laminados
300 g. de judías verdes (pueden ser congeladas)
1 pastilla de caldo de pollo
1 vaso grande de vino blanco
Pimentón picante o dulce
Aceite de oliva
Sal y pimienta
Ponemos es una cazuela amplia un poco de aceite y rehogamos el conejo troceado, le vamos incorporando los ingredientes por este orden: Los ajos laminados, la cebolla en juliana, el tomate pelado y a cubitos y las judías verdes.
Lo vamos removiendo para que se vayan integrando los ingredientes.
Le ponemos el vino blanco y dejamos que llegue a ebullición.
Le ponemos la pastilla de caldo espolvoreado y el pimentón.
Tapamos la cazuela y dejamos que se haga a fuego medio hasta que esté el conejo casi hecho pero que quede todavía un poco de salsa.
Le ponemos por ultimo los champiñones
Le damos unas vueltas con cuidado de que la carne no se deshaga
Dejamos que hierba todo junto un poquito hasta que la salsa reduzca y espese un poquito
Y emplatamos el conejo con las habichuelitas y las demás verduras
Regándolo todo con la salsa espesita y bien caliente
A este le dimos buena cuenta con un pan recién horneado de cebolla crujiente y nueces.
Placer de Dioses