Esta recetita es muy fácil, pero a pesar de ello, yo recomiendo que cuando se hagan sea en cantidad suficiente para congelar, más que nada es por lo de limpiar los chipis, si os pasa como a mi lo comprenderéis.
Sabéis como mataban a los conejos los cazadores? siiiiiiiii de un golpe en la nuca, bueno pues eso es lo que yo siento cuando termino, de estar tanto tiempo con la cabeza inclinada, luego me duelen muchísimo las cervicales, por eso prefiero que sea un día y no muchos, y limpio 2-3 kilos cada vez que los compro. Termino "matá" pero me compensa.
Aparte de esto la receta como siempre es fácil, ligera, sencilla y espero que rica para vosotros.
Empezamos con ella.
Ingredientes
Chipirones
Para el relleno
Las aletas y tentáculos de los chipis
Palitos de Surimi
Gambitas (pueden ser congeladas)
Zanahoria
Cebolla
Huevo duro
Aceite de oliva virgen extra
Sal y pimienta
Para la salsa
Cebolla
Ajos
Zanahorias
Tomate
Pulpa de pimiento choricero
Colorante alimentario
Vino blanco
Aceite de oliva virgen extra
Limpiamos los chipis y les quitamos los tentáculos y aletas reservándolos, los chipis los volvemos del revés y reservamos.
En una sartén con una gota de Aove ponemos la cebollita y la zanahoria cortadita y cuando se vea un poco transparente se añade todo lo demás troceadito menos los huevos cocidos.
Lo salpimentamos y dejamos que reduzca todo el caldito que suelta.
Dejamos que se temple y añadimos los huevos también a trocitos, revolviendo todo bien.
Rellenamos los chipis y los reservamos tapados.
En un perol o cazuela, ponemos una gota de Aove y hacemos un refrito con todos os ingredientes muy picaditos, menos el colorante, mojamos con vino y damos un hervor.
Ponemos el colorante, rectificamos de sal y pimienta y metemos los chipirones bajando el fuego. Los dejamos durante unos 15-20 minutos hasta que reduzca e caldo.
A final se puede espesar un poco la salsa si hiciera falta.
Emplatamos y adornamos con perejil fresco espolvoreado si se quiere y un poco de pimienta negra recién molida.
Servir caliente y acompañados de arroz blanco o puré de patatas.
Truqui: Al darles la vuelta a los chipis no se sale el relleno