Cuando era pequeña, jamás hubiera pensado en que me comería algo como esto, las berenjenas en casa se comían a rodajas, rebozadas y fritas, no había más formas de hacerlas, mi madre las hacia así, jamás las puso en otras elaboraciones, ni siquiera en algún pisto o como parte de un guiso, la verdad es que a ella no le iban mucho las verduras y eso se notaba en la forma de comer que había en casa, mi padre sin embargo habría dado un brazo por algo como esto, tienen todo lo que le gustaba, verduras, y una tan buena como la berenjena, bacon, que me imagino que como era un fans absoluto del jamón también le hubiera encantado, gambas, que se moría por ellas y lo que más le hubiera encantado, el toque dulce.
A mi padre le encantaba la miel, de cualquier manera, en una tostada, en la leche o a cucharadas, no recuerdo día que no la tomara, yo en este caso he puesto Sirope de Arce, que creo que también le hubiera hecho los honores y que con las berenjenas, casa más que bien.
Esta receta aparte de ser mi segunda aportación al Recetario Mañoso de este mes de Marzo, es un regalo a mi padre.
Papá para ti, que te gustaban estas cosas más que comer con los dedos, como me hubiera gustado poder hacértelas !!!
Bueno al lío, la elaboración no puede ser más fácil, ya sabéis que no me gusta complicarme la vida pero si, comer bien y esta receta lo mismo sirve para una cenita que para unos entrantes o incluso como aperitivos, todo depende del tamaño que les demos y la cantidad que pongamos en el plato. Estas eran grandes, así que con 2 o 3 por persona para una cena será más que suficiente.
Lo primero que haremos es cortar las berenjenas a lo largo y como mínimo de 1/2 cm. de grosor
Preparamos los 3 ingredientes principales para tenerlos todos a mano, por cierto, las gambas las tendremos peladas.
Pasamos las tiras de bacon por una sartén muy caliente sin nada de grasa
Pasamos las rodajas de berenjenas salpimentadas en la misma sartén muy caliente del bacon, solo una pasada para quitarles el orgullo, pero no hacerlas del todo.
Ponemos las lonchas de berenjenas y encima las de bacon
Luego unas gambas peladas y ligeramente saladas.
Enrollamos con cuidado y sujetamos con unas brochetas de madera
Pasamos con cuidado por harina, quitando el exceso y freímos en aceite caliente, solo hasta que se pongan un poco doradas, retiramos y ponemos sobre papel absorbente
Solo nos queda emplatar los caprichos de berenjenas con un buen chorro de Sirope de Arce, nosotros las acompañamos de unas coquinas al ajillo con Manzanilla, pero creo que con una ensalada de colores o ensaladilla de gambas también le iría perfectamente.
El corte es espectacular y del sabor ni os lo cuento, tenéis que probarlas y ya me contareis.
Están riquísimas y visualmente muy bonitas.
Espero que os haya gustado
Buen provecho
;-)