Estofado de costillas de cordero con patatas

Hay veces que me meto en la cocina y es lo que yo llamo por lo bajini  "remembranzas", es algo que se instala en mi mente y solo puedo sentir,  lo huelo y lo paladeo aún antes de haberlo hecho y  me trae algunos recuerdos imborrables, casi puedo tocarlos.

Desde que decido hacer cualquier comida, en la cabeza empiezan a bullir los preparativos, como vas a cortar las verduras, en que cazuela, el emplatado, con que pan..... no sé, son mil detalles, aunque en este caso somos dos a comer siempre me ha gustado, cuando estaban los niños más aún, pero ahora incluso para suplir sus ausencias, (están tan ocupados y viven sus vidas !!!) y pobres, hablan diariamente con su madre que es una pesá, pero no es lo mismo.
 

Pues bien, este es un plato que casi me hace llorar, cuando murió mi madre, mi padre se destapó como un magnífico cocinero, ya sabíamos que sabía hacer un montón de cosas, pero mi madre era la que mandaba en la cocina, y de pronto se presentó ante nosotros un cocinero y amo de casa de primera ya con 77 cumplidos.

Mi hijo mayor se quedó a vivir con él  y dudo que se le haya olvidado este plato, la primera vez después de la muerte de mi madre lo hice yo, y a partir de ahí, no había semana que no oliera la casa a cordero con papas que es como se llama aquí. 

Esta es la receta tal cual la hacia él (te quiero), mi madre la hacia así ( te quiero) y así se la enseñé yo a él. En casa seguimos comiéndola, siempre está igual de rica. Espero que os guste porque es de lo más simple pero de lo más agradecida y sabrosa.

Ingredientes
- 3/4 kg. de costillitas de cordero 

-3 patatas grandes,
- 2 d. de ajo, 

-1 cebolla

-1 hoja de laurel 

-Tomillo fresco
- Vino blanco bueno    

- Pimienta en grano, 

- Pulpa de pimiento choricero,
- Pimentón dulce

- Aceite de oliva y sal

- 1 Zanahoria
- 1 pastilla de caldo de pollo

Se limpian las costillitas de cordero de toda la grasa que tenga y se trocean. En la olla a presión se pone una gota de aceite y se doran todas las costillitas con la hoja de laurel, el tomillo la sal y la pimienta en grano. 

Cuando esté bien dorado se le añade una cucharadita de pulpa de pimiento choricero y se mueve bien procurando que no se queme, (si no se tiene pulpa el pimiento troceado estará bien). Acto seguido se ponen la cebolla y los ajos finamente cortados y se une todo muy bien. Se cubre todo de vino blanco y la pastilla de caldo de pollo demenuzada y se pone a cocer a fuego fuerte.

Cuando este hirviendo se añaden las patatas chascadas a trocitos y la zanahoria a rodajas, se pone colorante si se quiere.

Dejar hervir por espacio de 20 minutos aproximadamente a fuego medio-fuerte.

Cuando se habra la olla si queda mucho caldo se deja hervir un rato a fuego fuerte hasta que la salsa espese y reduzca.

Se emplatar bien caliente y se come acompañado de unas cebolletas frescas con vinagre ó una ensalada al gusto.