Lomo de pavo a lo Apache

Como estoy que me muero de hambre y que conste que no es porque no coma sino porque se me antoja todo lo que no puedo comer, pues anoche cuando estaba haciendo la cena me sorprendí haciendo esta patochada en el plato, que amargamiento, dos pobres filetitos de pavo adobado, más tiesos y tristes que yo y un poco de ensalada de surimi, en fin que cuando me di cuanta había hecho un indio (ó una india por lo de la delantera ahora que me fijo jajaja) eso si a mi estilo, seguro  que a vosotros os parecerá más un pollo ó cualquier otra cosa, yo preferí pensar que me estaba comiendo un indio entero con plumas y todo, a ver si así llenaba el buche y llegaba a por la mañana sin tener que visitar el frigo, al final vaya a tener que hacer lo que hacia mi padre cuando yo era pequeña, ponía una silla en el pasillo para que me chocara con ella cuando me levantaba sonámbula (ya no lo soy pero lo era y mucho) y ellos me oyeran en mis paseos por la casa, estoy por poner una cuerda con cascabeles en la puerta de la cocina porque me entran unas ganas terribles de levantarme por la noche, ir al frigo y si me pillan decir que no me acuerdo de nada.

Es la coartada perfecta porque como siga cenando esto con un simple yogur, voy a terminar haciendo edificaciones con los trocitos de zanahorias como si se tratara de las arquitecturas que teníamos de niños. 

La dieta va muy bien pero no puedo con los antojos, pero si  no suelo comer bombones nada más que dos o tres veces al año y me dan ganas de salir corriendo a por una caja y no dejar ni uno!!!

Hasta manteca de cerdo blanca se me vino a la cabeza el otro día y creo que no la como desde hace la friolera de 40 años por lo menos.

Bueno pues como la receta no tiene misterio os dejo un par de fotos más y os dejo.

Solo pasar los filetes por la sartén pincelada de aceite hasta que estén dorados

La ensaladilla era de surimi, cebolla, perejil, ajito picado y mayonesa acalórica, y el tomate aliñado con sal.

A ver si mis hijos se deciden a traerme nietos porque esto no puede ser de lo más patético y ridículo.

Lo siento intentaré que no vuelva a pasar.