Gallina al vino tinto

Lo mismo que los conejitos de campo, no hay color entre un pollo de corral y uno de granja y si encima puedes conseguir una gallinita feliz, pues ya ni os cuento, claro que a esta se le acabo la felicidad de tajo (nunca mejor dicho) y a terminado en mi mesa.

Que ricas están, con esa carne tan recia pero que a base de paciencia y cariñito se termina poniendo tierna y melosa, 

Compre una y como seria la señora que tuve que cortarla en dos, porque con media casi había para 4 personas de las que se sientan en la mesa con hambre, pesaba más de 3 kilazos..

Muy fácil, ya sabéis es mi tónica, no me gustan las elaboraciones complicadas, un poquito para ayudar,  pero en pocas cantidades para que prevalezca el sabor del producto principal.

Ya conté una vez como mataba mi madre a estas criaturitas, y no es momento para levantarle el estomago otra vez todos, así que obviando esto, recuerdo cada vez que mi madre se cargaba a una, nos encontrábamos dentro de ella lo que yo he encontrado en esta, un racimo de huevitos que una vez guisados es un bocadito delicioso.

En fin, que cargada con mi gallina y mis recuerdos, me he metido en la cocina y ha salido este platito.

Ingredientes 

1/2 gallina

Verduras para sofrito

1 cucharada de caldo de pollo en polvo o pastilla

1 cucharada de pimentón dulce mezclado con picante

1 rama de tomillo

1 hoja de laurel

1 vaso de vivo tinto

Sal y pimienta negra

Aceite de oliva virgen extra

Chamuscamos, lavamos y cortamos la gallina en trozos  regulares, quitando todo rastro de grasas.

Mirad el racimo de huevitos que traía !!!

En una cazuela o en la olla a presión, ponemos una gota de AOVE, y sofreímos las verduras que mas nos gusten, en mi caso, ajos, cebolla, pimientos de colores y tomate, todo cortadito. Metemos también las hierbas y pochamos todo junto.

A continuación incorporamos la gallina, los pimentones y el caldo de pollo, revolvemos bien hasta que se quede todo impregnado en la gallina.

Ponemos el vino, dejamos que se evapore el alcohol y salpimentamos.

Que hierva a fuego lento, hasta que esté tierna la carne.

Si queremos reducir el tiempo se puede hacer en olla a presión, y una vez que este dejar la olla abierta hasta que la salsa reduzca, pero como queda a fuego lento en cazuela, es insuperable

Os apetece? ya veis que es muy facil, pero el resultado es para repetir.

Imprescindible un buen trozo de pan al lado, esa salsa no se puede quedar en el plato.

Buen provecho.