Patorra de pavo con sangria

Esta receta ha sido un reto para mi, hace algún tiempo me enviaron unas botellas desde Bodegas Valdepablo, una de tinto con la que hice unas Carrilladas con sofrito en salsa de vino  riquísimas, luego con otra de vino dulce con la que hice Conejo al vino dulce d´orange, también fué muy interesante y por supuesto rica, pero con sangría?

 Que podía hacer con ella aparte de ponerle hielo y bebérmela? Incluso ellos me dijeron que si no se me ocurría nada que os hablara de ella acompañando cualquier plato, pero a mi lo peor que me pueden decir, es que no importa si no se me ocurre algo, ya sabe todo el que me conoce que mi frase preferida es "la imaginación al poder" yo no podría vivir sin ella, en todos los ámbitos de mi vida es mi imaginación la que me hace vivir más intensamente, incluso algunas veces demasiado....

En fín que compre unas patas de pavo igual de grandes de las de cordero, la madre del amor hermoso!!! como tenia que ser el pollo jajajaja. Cada pata peso, casi  1 1/4 kg., me daba pena trocearlas y una de ellas la he cocinado al horno en papillote.

Macerada con que? con la Sangría !!!!

 Al fin y al cabo es afrutada y al pavo le va la fruta divinamente.

Que cosa más rica, tierno y meloso hasta decir basta, es muy fácil de hacer y supongo que con pollo saldrá igual de bueno. Mirad la salsa que ha salido con la Sangría y una naranja, algo espectacular, de verdad.

Los ingredientes 

Una patorra de pavo o un pollo

1 vaso de Sangría especial Yago

1 pastilla de caldo de pollo  

1 naranjas

Copos de chíles

Romero

Especias de ajo y pimentón  

Aceite de oliva virgen extra con romero

Sal y pimienta

Estas son las botellas que nos enviaron, en las otras recetas hay mucha información sobre ellos, pero si de verdad queréis conocerlos, lo mejor es entrar en su pagina y ver el montón de productos que nos ofrecen, todos ellos con información detallada

En una bandeja, ponemos papel de aluminio o de horno y encima la patorra de pavo, salpimentamos y ponemos todas las demás especias (cada uno al gusto) y la pastilla de caldo espolvoreada.

Regamos con la Sangría especial Yago y el zumo de la naranja, si cae la pulpa mejor.

Cerramos el papillote con otro papel de aluminio, procurando que quede bien sellado

Metemos en el horno precalentado a 160º durante 1 hora, cuando haya pasado ese tiempo, sacamos y abrimos con cuidado, esto es lo que nos encontraremos, el pavo casi  hecho y un montón de salsa aromatizada.

Le damos la vuelta a la patorra dejando la piel por encima y volvemos a repetir el proceso, pero si poner más líquidos, volvemos a cerrar y volvemos a meter en el horno una media hora aproximadamente.

 Para que os hagáis una idea del tamaño, entraba en el horno justito, aproveche una vez que estaba terminado para dorar la patorra, ya fuera del papillote y un pan que acababa de hacer, mala idea porque con el pan caliente, no se puede dejar de mojar sopas en la salsa aunque lo intentes jajaja

Bueno pues solo queda llevarlo a la mesa, trincharlo y comerlo, yo antes de hacer eso, puse la salsita en un cacillo y la espese un poco con espesante exprés, una vez espesada regué la carne con ella.

No os podéis ni imaginar el sabor maravilloso de la carne y la salsa con la Sangría, me quedo una poquita, porque también nos tomamos un vaso con hielo para acompañar, pero desde luego que pienso hacer otro, pero esta vez con pollo a ver que tal.

Buen provecho y felicidades a los Papis,Pepes y Pepas

;-)

 Bodegas Valdepablo

Sangría especial Yago

La sangría surge ya en la época clásica en las áreas costeras mediterráneas donde se endulzaba el vino con zumos de frutas para hacerlos más refrescantes. Así sobrevivió la tradición y tomó el nombre de “sangría” por su color rojo vivo, convirtiéndose en la época moderna en la bebida más popular en España para cualquier ocasión festiva.

 

 NOTA DE CATA

 Color rojo vivo.
En nariz muestra todo el esplendor de los campos de naranjos y limoneros en época de recolección finamente fundidos con los aromas varietales del vino y dulces notas de canela. En boca es equilibrada con un postgusto largo y refrescante.